Felisberto Hernández (Montevideo, 1902-1964) fue un pianista profesional que con dieciséis años acompañaba películas mudas en los cines de Montevideo. Con veinte comenzó a dar recitales de sus propias composiciones y publicó su primer libro de relatos, "Fulano de tal" (1925), al que seguirían "El libro sin tapas" (1928), "La cara de Ana" (1930) y "La envenenada" (1931). Tras su viaje a París abandonó la música y se dedicó por completo a la creación de una obra que ejercería una enorme influencia sobre escritores como Julio Cortázar, Italo Calvino, Gabriel García Márquez o Enrique Vila-Matas.