Con el objetivo de conocer el mundo social de las personas hospitalizadas, Erving Goffman realizó un trabajo de campo como observador participante durante un año en un Hospital Psiquiátrico en Washington, cuyo resultado es el presente libro. Compuesto por cuatro ensayos que parten de fuentes sociológicas distintas, el autor intenta esclarecer la situación de la persona internada en una Institución total: organizaciones particulares por su impermeabilidad al exterior, su intento de regimentar al milímetro las conductas de sus miembros, su carácter des-responsabilizador y violento, y su estructura terriblemente jerárquica. Goffman expone una versión sociológica de la estructura del yo. Lentamente se va separando al interno del mundo de afuera, proceso que comienza en cuanto ingresa: se le desnuda y despoja de sus objetos personales y se le niega toda intimidad y privacidad, siguiendo un proceso de despersonalización. El hospital psiquiátrico es analizado aquí por dinámicas sociales que lo hacen similar a otras instituciones como la cárcel, el campo de concentración, el cuartel o el convento de clausura. Má